Macedonia para ver, jugar y escuchar

Varias cosillas que comentar, así, sobre la marcha, y sin tener para nada en cuenta la temática que solemos tratar en este, nuestro blog. ¿Con qué coño nos viene este tío ahora?, os preguntaréis; pues con popurrí, potaje o ensalada de cosillas que he visto, jugado o escuchado últimamente. Y empiezo desaconsejando el visionado de 'Solomon Kane' (sí, con cine empezamos), un putruño bestial que engaña desde el principio, haciéndonos creer que vamos a seguir los pasos de un héroe con mayúsculas, mientras deglutimos ávidamente el grueso de palomitas que reposa en nuestro regazo; nada más lejos de la realidad: No hay héroe porque el argumento y encadenados durante toda la película no lo permiten; las luchas se suceden en pantallazos confusos que nos dejan con las ganas de ver al adalid que nos prometieron en el engañoso trailer (no me vuelvo a fiar ni de uno); la mayoría de situaciones llaman a la carcajada cuando menos y el final es de lo peorcito que he visto en años: apresurado y con enemigos finales nada a la altura; con todo este paño, imaginad el guión y llorad. No la recomiendo, aunque para inflarse de palomitas y echarse unas risas puede valer. El trailer a buscarlo por ahí, que de esta en concreto me da pereza ponerlo xD (Pica debajo para seguir leyendo).
 ¿Qué toca ahora? Ah, sí, lo que he jugado. He comprado 'Splosion Man' en XBLA y lo estoy flipando con ese experimento explosivo con patas que corre, gime, grita y se vuelve loco bajo nuestro control, mientras revienta, vuela, salta, hace aspavientos de todo tipo y se merienda infinidad de enemigos (para empezar científicos y robotijos, que no voy muy adelantado). El enfoque de la acción varía con suavidad, comodidad y elegancia mientras pasamos por los diversos niveles encontrando nuevos escollos y maneras de sortearlos. Colorido, trepidante, histríonico, auditivamente impecable, y con un personaje que viste un carisma envidiable. Compra obligada para los amantes de las buenas plataformas y para los que no lo son, también. Gameplay al canto.



Seguimos con lo que he escuchado; y es que surfeando por la red me encuentro con estos Jet, una banda australiana que nos dejó un pedazo de larga duración en 2009 llamado 'Shaka Rock', y que a pesar de tener alguna leve pincelada popera en el personal Hard Rock que han plasmado en este último trabajo, me han ganado el oído y el corazón de una manera total. Al escucharlos rememoro grupos como Stone Roses, Oasis, Kula Shaker, Inxs (grupo que curiosamente es australiano también, y a cuyo cantante recuerda en algún tema el frontman del grupo que nos ocupa); también hay toques de rock sureño a lo Lynyrd Skynyrd o Black Crowes y guiños muy ténues que reflejan la influencia de superbandas como Queen o AC DC.
Desenfado, rebeldía, libertad, ensoñación psicodélica, aire con olor al woodstock más viejo, visiones de flores en el pelo sin la cursilería a cuestas, amor libre y electricidad convertida en el mejor sonido.
Músicos con tablas y buenos artesanos de un tañido que no se debe perder, por el bien de la música y de nuestros cerebros que, cada vez más, están sometidos al sonsonete mal enlatado de una industria que se tambalea y tira de cualquier cosa para que se haga 'hit' y muera. A mí me hacen temblar, retorcerme y visionar utopías idílicas donde todo lo bueno está permitido (¿estoy hablando del paraíso?...y eso que no soy religioso). Siempre es difícil explicar con palabras lo que sucede en nuestro cerebro cuando cualquier colchón sonoro y el aderezo que lo acompaña hace que se nos pongan los pelillos como escarpias, así que no queda otra que recomendar que os hagáis una cuenta en Spotify y escuchéis el disco enterito o que visitéis el MySpace de los artistas en cuestión. Yo os dejo por aquí un par de temitas y ya me contáis. Hasta la siguiente entrada.